Candy Kush

Candy Kush: dulce variedad con un buena dosis de THC

La Candy Kush presenta elementos índica, sativa y ruderalis en su mapa genético. La variedad es el resultado del cruce entre las cepas Auto Pounder y Kush. Esta cepa feminizada aporta un dulce sabor que seduce a los fumadores de cannabis, y tampoco defrauda al llegar la época de la cosecha.

Cuando fumes la Candy Kush, prepárate para experimentar un potente subidón con efectos corporales. Esta cepa tiene el potencial de dejarte “zapateado” si estás buscando algo de ayuda para dormir por las noches. Es una excelente opción para los pacientes medicinales que están buscando una variedad de cannabis que ayude a la hora de tratar dolores de cualquier tipo.

Para los fumadores que adoran unos cogollos sabrosos, no se sentirán decepcionados cuando disfruten de un porro o inhalen de una pipa cargada con Candy Kush. Esta cepa de cannabis recompensa a los fumadores con un subidón muy dulce que añade toques de caramelo y especias.

La Candy Kush es una excelente variedad para operaciones de cultivo discretas que quieran seguir en el anonimato. Raramente excede los 60cm de altura tanto cuando crece en exterior como en interior. Este tamaño la convierte en ideal para pequeños armarios de cultivo que pueden encajar en cualquier lugar insospechado. Podría cultivarse incluso en una caja o en un ropero modificado para llevar la discreción al máximo nivel.

Los cogollos producidos por esta dulce variedad de hierba son ricos tanto en THC como CBD, con buenas cantidades de ambos cannabinoides. La Candy Kush es una gran fumada para consumidores recreativos, pero también para fines terapéuticos. Este cepa agradará a los cultivadores que quieran recoger cogollos cuanto antes, ya que solo tarda 65 días desde la semilla hasta la cosecha.